Alguna coincidencia con las chilenas, no es
mera casualidad
Cuantiosas
leyes protegen a las comunidades indígenas de Argentina, pero no hay
cumplimiento efectivo.
Egidio
García, diputado indígena de Chaco, lo resume así: “La discriminación hacia los
aborígenes es moneda corriente. Los indígenas no existimos en la agenda de
Estado, ni de la justicia, ni de los organismos de derechos humanos.”[1]
Algunas
normas afectan a los indígenas y sí tienen cumplimiento efectivo.
El
monocultivo de soja transgénica tiene consecuencias sociales, económicas,
ambientales y sanitarias. Su autorización, y la del cuestionado agroquímico
glifosato, fue aprobada rápidamente por el gobierno de Carlos Menem. El
Secretario de Agricultura era Felipe Solá, que autorizó el paquete tecnológico
basado en los estudios de la empresa Monsanto. En un hecho inaudito, el Estado
no realizó estudios propios sobre efectos ambientales y sanitarios.
Además
de privatizar y permitir el desguace de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF),
el gobierno de Carlos Menem también aprobó la Ley 25.080, que impulsa el
monocultivo de árboles. Subsidia empresas, las exime de impuestos
(inmobiliario, ingresos brutos), les otorga la devolución del IVA y la garantía
de no afectarlas con cambios tributarios durante treinta años.
La
avanzada minera también cuenta con una legislación hecha a medida: Ley de
Inversiones Mineras, Código de Minería, Acuerdo Federal Minero y Ley de
Protección Ambiental. Toda una ingeniería jurídica puesta al servicio de las
empresas. Éstas sólo deben pagar un tres por ciento de regalías a las
provincias, pero deducen los costos de transporte, fletes, seguro, molienda,
comercialización, administración, fundición y refinación, entre otras ventajas.
Todas
esas leyes, que posibilitan la extracción de recursos naturales, fueron
sostenidas por todos los gobiernos posteriores al menemismo.
A
diferencia de legislación indígena, esas leyes y normativas se cumplen al pie
de la letra.
En. Aranda, Darío. Argentina originaria. Genocidios, saqueos y
resistencias. La Vaca Editora, Buenos Aires, 2010.
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